Jesucristo, Rey del Universo

Bendito sea Dios,
que nos alienta
en nuestras luchas.

sábado, 21 de agosto de 2021

Oremos con los Padres de la Iglesia: San Agustín

 


El 28 de agosto la Iglesia celebra la fiesta de San Agustín, que mejor momento para pedirle su intercesión por nosotros y para aprender con él la mejor forma de orar.


En preparación para esta fiesta te invitamos  a enfocarte cada día en una de estas 5 sugerencias que hace San Agustín a su amiga Proba en sus cartas 130 y 131. Es un viaje espíritual que nos ayudará a profundizar y mejorar nuestra oración. Puedes ayudarte con la lectura de la Carta 130 que contiene citas de los apóstoles, pasajes del Nuevo Testamento y las enseñanzas sencillas de San Agustín.


Puedes realizar este viaje desde el  23 de Agosto y hasta el 27 de Agosto, practicando cada día una sugerencia y meditando sobre cómo puede impactar tu vida... Ánimo y bendiciones.


Puedes ver la Carta a Proba en este enlace: Carta 130 


domingo, 15 de agosto de 2021

Oremos con los Padres de la Iglesia: Métodos para Orar

 


Los Padres de la Iglesia nos dan muchas recomendaciones prácticas para realizar una oración serena y sincera, que brote del corazón. Algunas de ellas las compartimos acá: 

  • El cristiano ora en todo lugar en toda ocasión, no usa muchas palabras
  • Si está en su casa puede escoger un sitio especial para su oración, un lugar tranquilo
  • Sin embargo, el mejor lugar para la oración es en la Iglesia durante la celebración de la Eucaristía
  • Antes de orar debe examinarse internamente
  • Antes de orar trata de perdonar todas las ofensas recibidas sacando de su alma toda perturbación
  • Una vez hecho esto, se encontrará más dispuesto y atento a lo largo de toda la oración
  • Debemos orar con nuestra mente y nuestro espíritu, pero sin sentimentalismos. 
  • Al orar disfrutemos del momento de contemplación que estamos viviendo
  • Al orar descansamos en el Señor y nos sentimos más tranquilos y en paz
  • Al orar entregamos al Señor nuestras cosa y El nos escucha
  • En ciertos momentos de la oración cuando decae un poco el deseo o la atención. entonces es bueno decir algo en voz alta, para que se retome la concentración.

Con base a estas recomendaciones de los Padres, me parece que al orar debemos escoger y ordenar muy bien tanto el lugar físico como el lugar espritual. 


El lugar espiritual es el corazón, por lo tanto debemos tratar, tal como nos recomiendan los Padres, de tener el corazón en orden al momento de orar: tratar de eliminar de nuestro pensamiento y nuestro corazón aquellas cosas que nos perturban, tratar de tener un corazón limpio. Esto último puede ser con un pequeño examen de conciencia antes de orar. Si sabemos que tenemos sentimientos negativos en ese momento, pues ofrecerlos al Señor como parate de nuestra ofrenda de oración, pidiendo su ayuda para superarlos. 


En cuanto al lugar físico y la misma postura del que ora, también sería ideal tener un lugar que invite al recogimiento, a la meditación, que sea tranquilo para pensar con claridad. Los Padres recomiendan la Iglesia como el mejor lugar para orar, especialmente la Misa donde compartimos con los demás, porque la oración cristiana es comunitaria por excelencia.  


Otro momento muy propicio también, es cuando exponen el Santísimo y todo el mundo guarda el debido respeto, asi es muy linda la oración porque se siente uno acompañado, no solo del Señor sino del prójimo.  En casa mi papá tenía su lugar especial para rezar y prender su velita, eso ha sido un hermoso ejemplo para mí. 


En lo que respecta a la postura, coincido con los Padres que rezar en voz alta ayuda a la concentración, me pasa mucho con el rezo del rosario, me gusta más cuando es con otra persona. En cuanto a la posición creo que el mismo recogimiento nos lleva según el lugar a estar de rodillas o con las manos en el pecho, eso si depende del lugar y el momento. La Misa por ejemplo tiene sus posturas propias segpún la liturgia: de pie, de rodillas, sentados, etc.


Pero ni el lugar físico, ni la postura, ni el estado de nuestro corazón deben ser excusas para dejar de orar... el Señor en su infinita misericordia se alegra con toda oración: desde la más sencilla, la más turbulenta, hasta la más excelsa... en mi opinión, estas recomendaciones no son para que al Señor le agraden más nuestras oraciones, son para nosotros, para que nuestra oración sea cada día más edificante y nos lleve a ser mejores cristianos.  


Por eso me encanta esta frase de Juan Casiano:


"El que no ora más que cuando está de rodillas, ora muy poco. Pero quien, estando de rodillas, se abandona en distracciones, no ora nada en absoluto". 


Me gustó su forma de invitarnos a que nos esforcemos para que nuestra oración sea cada vez mejor , pero que estemos alertas , que no debemos confiarnos, porque a veces hacemos las oraciones de rutina pero con la mente en otra parte.


Que estas recomendaciones nos ayuden a orar con la mente, con el alma y con el corazón.

domingo, 8 de agosto de 2021

Oremos con los Padres de la Iglesia: San Cipriano

 




 A propósito de la Oración para San Cipriano, nos dice nuestro Papa Emérito BENEDICTO XVI, en su AUDIENCIA GENERAL, del Miércoles 6 de junio de 2007:


"En definitiva, san Cipriano se sitúa en los orígenes de la fecunda tradición teológico-espiritual que ve en el «corazón» el lugar privilegiado de la oración. Según la Biblia y los santos Padres, el corazón es lo más íntimo del hombre, el lugar donde habita Dios. En él se realiza el encuentro en el que Dios habla al hombre y el hombre escucha a Dios; el hombre habla a Dios y Dios escucha al hombre. Todo ello a través de la única Palabra divina. Precisamente en este sentido, remitiéndose a san Cipriano, Esmaragdo, abad de San Miguel en el Mosa en los primeros años del siglo IX, atestigua que la oración «es obra del corazón, no de los labios, porque Dios no mira las palabras sino el corazón del que ora» (La diadema de los monjes, 1).

Queridos hermanos, hagamos nuestro este «corazón que escucha» del que hablan la Biblia (cf. 1 R 3, 9) y los santos Padres; lo necesitamos mucho. Sólo así podremos experimentar con plenitud que Dios es nuestro Padre, y que la Iglesia, la santa Esposa de Cristo, es verdaderamente nuestra Madre".

Oremos con los Padres de la Iglesia: San Clemente Romano

Una hermosa oración de San Clemente para comezar el día: 


Te rogamos, Señor,

que seas nuestro auxilio y nuestro protector. 

Sálvanos en la tribulación,

levanta a los caídos,

muéstrate a los necesitados,

sana a los enfermos, vuelve a los extraviados de tu pueblo,

sacia a los hambrientos,

da libertad a nuestros cautivos,

levanta a los débiles,

consuela a los pusilánimes;

conozcan todas las naciones que tú eres el único Dios,

y Jesucristo es tu Hijo,

y nosotros tu pueblo las ovejas de tu rebaño...

 

Epístola a los Corintios, 59,2-61, 3

San Clemente Romano.

 

San Clemente Romano es el tercer sucesor de San Pedro, es uno de los llamados Padres Apostólicos y una de las figuras principales de la antigüedad cristiana. Eusebio lo menciona siempre junto a San Ignacio de Antioquia. Según San Ireneo, Clemente había tratado a los Apóstoles, de los que había recibido la predicación viva del Maestro.  Según Tertuliano, de Pedro recibe el diaconado, el sacerdocio y el episcopado. Y según Orígenes, con Pablo colabora en la fundación de la Iglesia de Filipos. Nos entronca, pues, con las mismas fuentes.


En su carta a los Corintios, San Clemente además de esta hermosa oración los invita a trabajar unidos por el reino de Dios:

«Es preciso someterse con humildad. Dejemos la soberbia, enemiga de la armonía. Las ofrendas y los ritos litúrgicos han de celebrarse, no a voluntad de cada uno y sin orden, sino conforme a lo ordenado por el maestro. Sigamos el canon venerable y glorioso de nuestra tradición, conservemos el muro fraterno de la caridad. Sin ella nada es agradable a Dios. La cabeza no es nada sin los pies, pero, a su vez, los pies serían inútiles sin la cabeza. Los pequeños y los grandes se necesitan mutuamente».


sábado, 7 de agosto de 2021

Oremos con los Padres de la Iglesia: Orígenes

 Una forma de conectarnos con la ORACIÓN es aprendiendo de los Padres de la Iglesia. Son varios de ellos los que dedicaron espacio para escribir sus pensamientos, modos y recomendaciones para orar. Hoy les comparto un poco de lo que nos enseña Orígenes acera de la Oración:


Si quieres conocer un poco más sobre lo que nos recomienda Orígenes puedes buscar su Tratado de Oración. En este link puedes bajar un extracto.  Extracto del Tratado

 

Te rogamos, Señor, que seas nuestro auxilio y nuestro protector.